La mortadela es un fiambre italiano que merece un lugar en tu lista de compras. La mortadela no solo es una adición bienvenida a la tabla de embutidos, sino que también es deliciosa en sándwiches, rellena de pasta y más.
La mortadela es un embutido emulsionado originario de Bolonia, Italia. Está compuesta por carne de cerdo curada con al menos un 15 % de grasa de cerdo en cubos, pistachos enteros o picados y condimentada con pimienta negra y bayas de mirto. El contenido de grasa adicional le da a la mortadela su característico aspecto de “lunares” blancos.
En Italia, es común ver cubos gruesos o rodajas finas de mortadela servidas como aperitivo.
Este fiambre también combina bien en una tabla de charcutería con otras carnes, quesos, frutas, pan y condimentos como la mostaza. La mortadela es deliciosa en un sándwich frío o en un panini caliente, y es un buen complemento para platos de pasta con queso o para rellenar ravioles o tortellini. Algunas recetas de albóndigas italianas requieren mortadela para darle un toque extra sabroso. También se puede mezclar para hacer una pasta para untar.
El sabor principal de la mortadela es el rico y grasiento cerdo, con toques de especias y pistachos que se suavizan al cocinarse. La mortadela tiene una textura sedosa y abundante, similar a la de la mortadela.
La principal diferencia entre la mortadela y la mortadela es el modo en que se elaboran. En la mortadela, los cubos de grasa desmenuzan la carne, mientras que en la mortadela la grasa y la carne se emulsionan formando una mezcla uniforme. A diferencia de la mortadela, que tiene un rico sabor a cerdo y un toque de picante, la mortadela puede resultar insípida en comparación y carece de la textura sedosa de la mortadela (debido a la falta de cubos de grasa).
Existen dos tipos principales de mortadela: la mortadela y la mortadela boloñesa. Si bien las dos variedades tienen un aspecto y un sabor similares, la mortadela boloñesa significa que se produjo en la región de Emilia-Romaña, en Italia. Cuando encuentre mortadela boloñesa, es posible que observe variedades adicionales, ya que los productores a veces utilizan diferentes proporciones de carne y grasa, así como diferentes especias.
- Macarrones al horno con mortadela
- Sándwich Muffuletta al estilo de Nueva Orleans
- Sándwich de mortadela frita
Consulte en el mostrador de delicatessen de su supermercado local, pero si no lo tienen, puede encontrarlo en una tienda de especialidades italianas o pedirlo en mercados especializados en línea.
Conservar la mortadela en el frigorífico hasta 7 días. Una vez abierto, guardar el paquete en un recipiente hermético.