Las gominolas son un dulce clásico con un centro blando y masticable y una fina capa de caramelo. Las posibilidades de sabor son infinitas, lo que ha llevado a la creciente popularidad de este divertido y pequeño dulce.
Se cree que las gominolas son un híbrido de dos dulces, las delicias turcas y las almendras jordanas, ambos de hace cientos de años. Las delicias turcas son un dulce masticable que tiene una capa de azúcar en polvo. Las almendras jordanas son almendras que están simplemente recubiertas de una cáscara de azúcar crujiente. Combina el centro masticable de las delicias turcas con la capa crujiente de una almendra jordana y tendrás lo que ahora conocemos como gominolas.
La primera referencia conocida a las gominolas fue a finales del siglo XIX, cuando William Schrafft, un pastelero de Boston, animó a los estadounidenses a enviar gominolas a los soldados que luchaban en la Guerra Civil. A principios del siglo XX, las gominolas eran un dulce común que disfrutaban tanto niños como adultos. No fue hasta la década de 1930 que las gominolas se asociaron con la Pascua, probablemente debido a su forma de huevo. Las gominolas siguen siendo uno de los dulces de Pascua más comunes en la actualidad.
Las gominolas tuvieron un impulso en su popularidad a mediados de los años 60, cuando el entonces gobernador de California, Ronald Reagan, expresó su amor por este dulce. Se dice que Reagan utilizó este dulce para ayudar a dejar el hábito de fumar y que siempre tuvo gominolas a su alcance durante toda su presidencia. Jelly Belly, un importante productor de gominolas, incluso creó una gominola especial con sabor a arándanos para el presidente Reagan.
Como las gominolas son un dulce , no es de extrañar que los ingredientes principales sean azúcar, jarabe de maíz y almidón. El almidón se agrega para crear la textura gelatinosa y masticable. La capa fina y crujiente se logra con una técnica de endulzamiento llamada panning. Este proceso es la misma técnica que se utiliza para crear la capa fina de caramelo en otros dulces, como los M&M.
Se añaden ingredientes aromatizantes para diferenciar las variedades de gominolas y pueden ser naturales o artificiales según el fabricante. A veces se añade una pequeña cantidad de agente emulsionante al caramelo para mantener la textura uniforme y se puede utilizar cera de abejas comestible para recubrir las gominolas y evitar que se peguen o se disuelvan en condiciones de humedad.
Cada día aparecen nuevos sabores de gominolas, por lo que su popularidad seguirá aumentando. Cada año se consumen suficientes gominolas como para dar cinco vueltas al mundo. ¡Veamos cuánto tardamos en llegar a seis!